jueves, 23 de febrero de 2017

CARGOS INTERMEDIOS EN ENFERMERÍA; GESTIÓN DE PROXIMIDAD


Es esa compañera de trabajo que tiempo atrás compartía contigo las penas y alegrías de la jornada laboral. Que tomaba café contigo y te acompañaba a la fiesta de Navidad de la unidad. Aquella a la que siempre veíais con un libro. Un buen día, un anuncio en un tablón nos informaba que dejaba de ser nuestra “compañera” para ser la “supervisora”. Seguíais  viéndola como el día anterior y conocíais sus habilidades y conocimientos; pero sin embargo, no era igual.


        Un cargo intermedio en Enfermería abarca muchas responsabilidades por parte de la organización y hacia los profesionales. Somos personas que debemos salir de nuestro área de confort para desempeñar funciones de organización, que vayan en sintonía con la visión de la institución. Se nos exige gran esfuerzo, competencias en gestión, pero sobre todo, por parte de los profesionales, empatía, respeto, motivación, refuerzos, comprensión y que les defendamos ante la dirección.


       No es fácil la tarea que se nos encomienda una vez que asumimos el cargo. Debemos ser conscientes del papel vital que desempeñamos para el buen funcionamiento del servicio. Es un gran reto ejercer autoridad y liderazgo.

        Necesitamos que ejercer una “Gestión de proximidad” (Proximity Management). Así es como se define el desempeño de la Supervisión o cargo intermedio en Enfermería. Debemos trasladar las necesidades de la organización al funcionamiento del servicio; gestionar los recursos, humanos y materiales, siguiendo las directrices indicadas. Pero no es sólo el nexo de unión entre dirección y profesionales, va más allá, también lo somos con los pacientes y sus familiares.

    En 1986, Mintzberg, H., nos indicaba que “los gerentes poseen tres roles: interpersonales, informativos y de toma de decisiones”. Es decir, los gerentes, y aplicado en este caso al cargo intermedio, tienen un papel de “enlace” que permite involucrar a los proveedores y clientes. El “gerente de proximidad” es fundamental para este enfoque; participación, iniciativa, motivación y compromiso personal de todos los interesados.

       En 2007, Thévenet M. explica que “la implicación de los gerentes en la Gestión de Proximidad es importante para la consistencia, reciprocidad y cercanía”. Estos tres requisitos, son el eje del enfoque de participación en cualquier circunstancia y más aún en momentos de “crisis del sistema”, como los que se están viviendo en la actualidad. Entender esto por todos los cargos intermedios es el reconocimiento al esfuerzo de los profesionales para lograr el objetivo común, que son los pacientes y su salud, y siga siendo la prioridad.

      Y por último, y no menos importante, es aquello que tanto nos demandan los profesionales: el reconocimiento. Que nunca olvidemos los refuerzos positivos, con gestos, palabras o premios. Como dijo Frederick Herzberg, “la verdadera motivación viene del logro, desarrollo personal, satisfacción en el trabajo y reconocimiento”.